Archer es una serie de animación de espías, pero nada convencional, con situaciones disparatadas que se van sucediendo a lo largo de los episodios. Está realizada con una técnica de las series de animación por la casi obsoleta tecnología flash de adobe, al estilo de cálico electrónico. Puedes engancharte desde el primer capítulo, si eres de los que les gusta el humor directo y gamberro. Y es que puede llegar a ser bastante negro, ya que en esta particular agencia llamada ISIS con sus agentes y el resto de su personal tienen situaciones que implican casi siempre el sexo, insultos, asesinatos, sangre, vómitos, drogas, y como no, alcohol. Todo con un cierto sentido por aquello de ser espías.
Una de las virtudes que tiene esta serie es que continúa su historia teniendo presente todos los capítulos anteriores, si por ejemplo un personaje acaba en silla de ruedas, en los sucesivos sigue en esa misma situación, de forma que conforma cierta coherencia en el disloque que con cada historia. Estas historias además son conclusas, con una presentación de la trama, un desarrollo y un final, aunque en ocasiones está dividida en partes en dos o tres episodios.
Las auto-referencias también son un sello en la serie, así te hace recordar pequeñas tramas, situaciones o frases de los personajes anteriormente vividas con lo que te puede hacer aún más gracia si sabes de donde viene. Es por tanto una serie muy recomendable, aunque puede que su humor no sea de tu tipo, en ese caso, te parecerá algo ofensivo.